Ante Ti venimos pues Tú nos has llamado y nos atrae tu voz. Como un solo pueblo danzando en tu presencia te damos el honor. Sobre nosotros descienda el poder de tu Espíritu que nos hará clamar:
Abba, Padre. Aabba, Padre. hoy tus hijos cantamos, tu amor celebramos clamando con una voz: Abba, Padre (3 veces) Juntos caminamos buscando un a Palabra que nos habla de Ti. Solo tu presencia nos llena de esperanza, llenos para vivir. Sobre nosotros descienda el poder de tu Espíritu que nos hará clamar:
(¡Oh, Señor, ten piedad de mí! ¡Cristo, ten piedad de mí!) (Bis) Niños que mueren por falta de pan y justicia, madres sufriendo su angustia en soledad. Hermanos que luchan en guerras que a ti y a mí nos convienen mantienen nuestro mercado, nuestra paz y bienestar.
Estribillo Surcos de ríos resecos por la codicia de quienes tenemos de sobra para derrochar. Pueblos sedientos, sin agua, que están gritando: “¡justicia!”, llanto que brota en la herida de nuestra humanidad.
Estribillo ¡Oh, Señor! Crea en mí un corazón puro. Yo reconozco mi culpa, ¡ten piedad de mí! Que ante el dolor de mi hermano no quede impasible, ser hija tuya me mueva a compartir vida y pan.
Habla, Señor, que tu siervo escucha. Habla, Señor, que tu siervo escucha. (Muéstrame tu Voluntad a través de la Palabra, quiero conocerte más para amarte y seguirte.) (Bis)
Santo, Santo, Santo, Santo es el Señor, el Dios de la Vida, el Dios del Amor. Santo, Santo, Santo, Santo es el Señor, el Dios de la Vida, el Dios del Amor. (Bendito el que viene en nombre de Dios, el hombre que anuncia la liberación.) (Bis)
Estribillo Nota: - Inicio: 2 compases en LA y se para. - Cuando se pasa del LA7 al RE, se dan tres golpecitos.
Junto a ti, María, como un niño quiero estar, tómame en tus brazos, guíame en mi caminar. Quiero que me eduques, que me enseñes a rezar; hazme transparente, lléname de paz.
Madre, Madre, Madre, Madre. Madre, Madre, Madre, Maadre. Gracias, Madre mía, por llevarnos a Jesús, haznos más humildes, tan sencillos como tú. Gracias, Madre mía, por abrir tu corazón, porque nos congregas y nos das tu amor.