Dios te Salve María,
del Rocío Señora,
luna, sol, noche y día
y pastora celestial.
Dios te Salve María,
todo el pueblo te adora
y repite a porfía,
"como tú no hay otra igual".
Olé, olé,
olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
Olé, olé.
Al Rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe,
con un olé, olé,
olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
Olé, olé.
Dios te Salve María,
manantial de dulzura.
A tus pies noche y día
te venimos a rezar.
Dios te Salve María,
un rosal de hermosura.
Eres tú, Madre mía,
de pureza virginal.
Estribillo