Jesús está entre nosotros,
Él vive hoy
y su Espíritu a todos da.
Jesús, razón de nuestra vida,
es el Señor,
nos reúne en pueblo de amor.

Cambia nuestras vidas con tu fuerza,
guárdanos por siempre en tu Presencia.
Tú eres verdad, Tú eres la paz.

Estribillo
Rompe las cadenas que nos atan.
Llénanos de gracia en tu Palabra.
Gracias, Señor, gracias, Salvador.

Estribillo
Nuestras existencias hoy te alaban.
Nuestros corazones te dan gracias.
Tú eres amor, eres canción.

Estribillo final: terminar en el acorde
con el que se comienza el canto.
Aleluya, aleluya, aleluya.
Aleluya, aleluya,
alelu, aleluya.

Dios nos amó tanto (aleluya)
que envió a su Hijo, Jesús (aleluya)
Él nos ha salvado (aleluya)
con su muerte y resurrección.

Aleluya, aleluya, aleluya.
Aleluya, aleluya,
alelu----aleluya.
Versión Parroquia san Bruno-Misa de 20h:
Recíbeme,
con todo lo que Tú pusiste en mí,
con todas mis ofrendas del vivir,
con mis carencias.

Recíbeme,
con todo este vino y este pan,
son frutos de la vid y del trigal
que Tú transformas.

Recíbeme,
con todo bueno y malo que hay en mí,
con todo los deseos de seguir
por tu camino.

Iluminar,
es hoy el reto en la oscuridad
servicio entre la gente y de ayudar
por el camino.

Hoy es tiempo de dar
a manos llenas lo que se nos dio,
brillar, hasta consumirse,
iluminar a un mundo en penumbras
hasta que no quede yoo...

Iluminar,
es hoy el reto en la oscuridad
servicio entre la gente y de ayudar
por el camino.

Hoy es tiempo de dar
a manos llenas lo que se nos dio,
brillar, hasta consumirse,
iluminar a un mundo en penumbras
hasta que no quede yo,
si no Tú.

Coro de la Parroquia de Santo Domingo de Ourense y Coro Parroquial de Brunete:
Recíbeme,
con todo lo que Tú pusiste en mí,
con todas mis ofrendas del vivir,
con todas mis carencias.

Recíbeme,
con todo este vino y este pan,
son frutos de la vid y del trigal
para que los transformes.

Recíbeme,
con todo bueno y malo que hay en mí,
con todo los deseos de seguir
por tu camino.

Iluminar,
es hoy el reto en la oscuridad
servicio entre la gente y de ayudar
por el camino.

Hoy es tiempo de dar
a manos llenas lo que se nos dio,
brillar, hasta consumirse,
iluminar a un mundo en penumbras
hasta que no quede yo...

Iluminar,
es hoy el reto en la oscuridad
servicio entre la gente y de ayudar
por el camino.

Hoy es tiempo de dar
a manos llenas lo que se nos dio,
brillar, hasta consumirse,
iluminar a un mundo en penumbras
hasta que no quede yoo,
si no Tú.
(Santo es el Señor,
Dios de los hombres,
es el Señor.) (Bis)

Llenos están el cielo
y tierra de tu gloria,
el cielo y tierra de tu amor.
Él hizo el mar, Él hizo el cielo,
hizo la tierra; hizo a los hombres,
es nuestro Dios.
Todos cantad:
"Aquel que viene es el Señor.
Aquel que viene es el Señor."

Estribillo final: terminar en el mismo acorde
con el que se empezó el canto.

Notas:
- Cantar las estrofas con un nivel de voz más suave
y el estribillo más fuerte.
- Los chicos cantarán las estrofas
mientras que las chicas van repitiendo el estribillo,
solapándose ambas voces.
En el mar he oído hoy,
Señor, tu voz que me llamó
y me invitó a que me entregara
a mis hermanos.
Esa voz me transformó,
mi vida entera ya cambió,
y sólo pienso ahora, Señor,
en repetirte:

(Padre Nuestro, en Ti creemos.
Padre Nuestro, te ofrecemos,
Padre Nuestro, nuestras manos
de hermanos.)(Bis)

{Se reza el Padrenuestro}

Cuando vaya a otro lugar
tendré, Señor, que abandonar
a mi familia a mis amigos
por seguirte.
Pero sé que así algún día
podré enseñar tu Verdad,
ir a mi her `DO]mano y junto a él
yo repetirte:

Estribillo
Variación de letra en las estrofas:
Cuando vaya a otro lugar,
conmigo Te quiero llevar
a mis familia y a mis amigos
y seguirte,
porque Tú eres el Amor,
porque tu Nombre es la Verdad,
porque jamás me cansaré de repetirte…

Estribillo
Cuando miro alrededor,
Señor, me cuesta comprender,
me siento solo y al hablar
me quema un grito.
Se confunde con dolor,
Señor, la dicha de saber
que estás de nuevo junto a mí.
Te necesito.
Estribillo
Versión original:
Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros,
ten piedad de nosotros.

Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros
y danos la paz.
Hay un corazón que mana
que palpita en el sagrario,
un corazón solitario,
que se alimenta de amor.
Es un corazón paciente,
es un corazón amigo,
el que habita en el olvido,
el corazón de tu Dios.

Es un corazón que ama,
un corazón que perdona,
que te conoce y que toma
de tu vida lo peor.
Que comenzó esta tarea
una tarde en el calvario
y que ahora desde el sagrario
tan sólo quiere tu amor.

Decidle a todos que vengan
a la fuente de la vida,
que hay una historia escondida
dentro de este corazón.
Decidles que hay esperanza,
que todo tiene un sentido,
que Jesucristo está vivo,
decidles que existe Dios.

Es el corazón que llora
en la casa de Betania.
El corazón que acompaña
a los dos de Emaús.
Es el corazón que al joven rico
amó con la mirada
el que a Pedro perdonaba
después de la negación.

Es el corazón en lucha
del huerto de los olivos,
que amando a los enemigos
hizo creer al ladrón.
Es el corazón que salva
por su fe a quien se le acerca,
que mostró su herida abierta
al apóstol que dudó.

Decidle a todos que vengan
a la fuente de la vida,
que hay una historia escondida
dentro de este corazón.
Decidles que hay esperanza,
que todo tiene un sentido,
(que Jesucristo está vivo,
decidles que existe Dios.)(Bis)
Al estar en la presencia de tu divinidad
y al contemplar la hermosura de tu santidad
mi espíritu se alegra en tu Majestad.
Te adoro a Ti, te adoro a Ti.

Cuando veo la grandeza de tu dulce amor
y compruebo la pureza de tu corazón.
mi espíritu se alegra en tu Majestad.
Te adoro a Ti, te adoro a Ti.

(Y al estar aquí, delante de Ti, te adoraré.
Postrado ante Ti, mi corazón te adora. ¡Oh, Dios!
Y siempre quiero estar, para adorar,
y contemplar tu santidad.
Te adoro a Ti, Señor, te adoro a Ti.) (Bis)

Nota:
1ª estrofa:solista chica.
2ª estrofa:chica y chico.
Estribillo:todos.
Dios te Salve María,
del Rocío Señora,
luna, sol, noche y día
y pastora celestial.
Dios te Salve María,
todo el pueblo te adora
y repite a porfía,
"como tú no hay otra igual".

Olé, olé,
olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
Olé, olé.
Al Rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe,
con un olé, olé,
olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
Olé, olé.

Dios te Salve María,
manantial de dulzura.
A tus pies noche y día
te venimos a rezar.
Dios te Salve María,
un rosal de hermosura.
Eres tú, Madre mía,
de pureza virginal.

Estribillo