Hoy quiero, Señor, ponerlo todo en tu presencia,
darme hasta gastarme contigo y por Ti.
Hoy quiero, Señor, ponerlo todo ante tu puerta
para en todo amarte y servir.

Enciéndeme y déjame arder donde haga falta.
Enciéndeme y déjame ser tu luz,
y así poder llevarte hasta todas las almas,
saciar la sed que tienes Tú desde la cruz.

Hoy quisiera, Madre, poner todo en tu presencia,
darme hasta gastarme, decirle que sí.
Hoy te pido, Madre, que dejes mi puerta abierta
para en todo amarle y servir.

Estribillo
Señor, ten piedad de nosotros. (Bis)
Cristo, ten piedad de nosotros. (Bis)
Señor, ten piedad de nosotros. (Bis)

Primera vez: chicos.
Bis: chicas
Junto a Ti, Jesús, rezaré;
tu Palabra quiero vivir.
Tú me haces sencillo, Señor,
en tus Manos me dejaré.

(Aleluya, aleluya,
aleluya, aleluya.)(Bis)

Cantaré el amor que hay en Ti,
porque me amas y estás aquí.
Pones paz en mi corazón.
Con tu amor feliz yo seré.

Estribillo
Nunca dejaré de cantar
que Tú eres la luz y el amor.
Tu camino quiero seguir,
no me dejes solo, Señor.

Estribillo
Desde abajo (desde dentro) y desde cerca,
te encarnas en Nazaret
y en las cosas más pequeñas
nos invitas a creer.


(para ir a las repeticiones)

Nota:
3 veces: La primera, con arpegio. El resto, con rasgueo.
Lo que está entre paréntesis (desde dentro) es segunda voz y la hacen las chicas.
Santo, Santo, Santo es el Señor,
cielo y tierra, son tu don.
Tú nos llenas, de tu amor.
Mi Señor, tu Señor, nuestro Señor.

Bendito el que viene de Ti, Señor.
Bendito el que sabe oír tu voz.
Tu pueblo hoy te llama Salvador.
Mi Señor, tu Señor, nuestro Señor.

Estribillo
(Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,) (bis)
(ten piedad de nosotros,
de nosotros ten piedad.)(Bis)

(Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,) (bis)
(ten piedad de nosotros,
de nosotros ten piedad.)(Bis)

(Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,) (bis)
(danos la paz,
danos la paz.)(Bis)
Señor,
toma mi vida nueva,
antes de que la espera,
desgaste años en mí.
Estoy
dispuesto a lo que quieras,
no importa lo que sea,
Tú llámame a servir.

Llévame donde los hombres,
necesiten tus Palabras,
necesiten
mis ganas de vivir.
Donde falte la esperanza,
donde falte la alegría,
simplemente,
por no saber de Ti.

Te doy
mi corazón sincero,
para gritar sin miedo,
tu Grandeza, Señor.
Tendré
mis manos sin cansancio,
tu Historia entre mis labios,
y fuerza en la oración.

Estribillo
Y así,
en marcha iré cantando,
por calles predicando
lo bello que es tu Amor.
Señor,
tengo alma misionera,
condúceme a la tierra
que tenga sed de Dios.

Estribillo
Maestro,
tu promesa divina
de compartir un Reino
de justicia y amor.
Hoy
quiero ser tu testigo
Y sé Tú mi camino,
mi luz y mi amor.

Estribillo
Nota: la última estrofa no la cantamos.
(Sé de quién me he fiado,
confío, Señor, en Ti.
Y aunque a veces parezca de piedra,
confío, Señor, en Ti.
Y aunque el corazón se pegue a la tierra,
confío en Ti, confío en Ti,
mi Señooor, mi Señooor.) (Bis)

...mi Señor.
Has pensado alguna vez
lo grande y hermoso que es
recibir a Jesucristo
en un pedazo de Pan.

Quizás nunca imaginaste
que en este pedazo de pan
estaba el cuerpo de Cristo
queriéndote salvar.

(¡Oh, Jesús! Divino tesoro,
ahí estás, ahí estás,
esperando por nosotros,
ahí estás, ahí estás,
vivo sobre el altar.) (Bis)
Tantas cosas en la vida
nos ofrecen plenitud,
y no son más que mentiras
que desgastan la inquietud.
Tú has llenado mi existencia
al quererme de verdad.
Yo quisiera, Madre Buena, amarte más.

En silencio escuchabas
la Palabra de Jesús,
y la hacías Pan de vida
meditando en tu interior.
La semilla que ha caído
ya germina, ya está en flor.
Con el corazón en fiesta cantaré:

Ave María, ave María.
Ave María, ave Maríía.

Desde que yo era muy niño
has estado junto a mí,
y guiado de tu mano
aprendí a decir sí.
Al calor de la esperanza
nunca se enfrió mi fe,
y en la noche más oscura fuiste Luz.

No me dejes, Madre mía,
ven conmigo al caminar;
quiero compartir mivida
y crear fraternidad.
Tantas cosas en nosotros
son el fruto de tu amor.
La plegaria más sencilla cantaré:

Estribillo