Dios está aquí,
tan cierto como el aire que respiro,
tan cierto como la mañana
se levaanta,
tan cierto como que este canto
lo puedes oír.

Lo puedes sentir
moviéndose entre los que aman.
Lo puedes oír
cantando con nosotros aquí.
Lo puedes llevar
cuando por esa puerta salgas.
Lo puedes guardar
muy dentro de tu corazón.

Estribillo
Lo puedes notar
junto a ti en cualquier momento;
le puedes hablar
de esa vida que le quieres dar;
no temas ya más,
Él es Dios y nos perdona a todos;
Jesús está aquí,
si tú quieres le puedes seguir.

Estribillo
(Aleluya, aleluya,
aleluya, aleluya,
aleluya.) (Bis)

Si sientes que Cristo,
en ti vivo está
grita fuerte en tu alma:
¡Aleluya!
Si piensas que el mundo,
aún puede cambiar
grita fuerte en tu alma:
¡Aleluya!

Aleluya, aleluya,
aleluya, aleluya,
aleluya.
¿Qué te puedo dar que no me hayas dado Tú?
¿Qué te puedo decir que no me hayas dicho Tú?
¿Qué puedo hacer por Ti si yo no puedo hacer nada,
si yo no puedo hacer nada, si no es por Ti, mi Dios?

(Todo lo que sé, todo lo que soy,
todo lo que tengo es tuyo.)(Bis)
Santo, santo, santo,
el Señor Dios del universo.
El cielo y la tierra
están llenos de su gloria.

(Hosanna, hosanna,
hosanna en lo alto del cielo.) (Bis)

Bendito el que viene
en el nombre del Señor.

Estribillo
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
danos la paz, danos la paz, danos la paz.
RECÍBEME
CON TODA LA MISERIA QUE HAY EN MÍ
CON TODOS LOS DESEOS DE SEGUIR
POR TU CAMINO.

ILUMINAR
ES HOY EL RETO EN LA OSCURIDAD
SERVICIO, ENTREGA EN FIDELIDAD,
HASTA LA MUERTE.



Hoy es tiempo de dar
a manos llenas lo que se nos dio.
Brillar, hasta consumirse
iluminar a un mundo en penumbras,
hasta que no quede yo sino tú.

RECÍBEME
CON TODA LA MISERIA QUE HAY EN MÍ,
CON TODOS LOS DESEOS DE SEGUIR
POR TU CAMINO.

ILUMINAR
ES HOY EL RETO EN LA OSCURIDAD,
SERVICIO, ENTREGA EN FIDELIDAD,
HASTA LA MUERTE.



No se enciende una lámpara
para ponerla bajo el celemín.

La luz que encendiste en mí
la ponga yo en lo alto
y que María me ayude a decir sí.

RECÍBEME
CON TODA LA MISERIA QUE HAY EN MÍ
CON TODOS LOS DESEOS DE SEGUIR
POR TU CAMINO.

ILUMINAR
ES HOY EL RETO EN LA OSCURIDAD,
SERVICIO, ENTREGA EN FIDELIDAD,
HASTA LA MUERTE.


RECÍBEME
Versión Parroquia san Bruno-Misa de 20h:
Intro:


Dijiste "sí"
y la tierra estalló de alegría.
Dijiste "sí"
y en tu vientre latía divina la Salvación.

Hágase en mí, de corazón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

(María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de Dios Redentor.)(Bis)
(Si se termina aquí el canto, en el bis:
primavera de Dios Redentor.)

Gabriel tembló,
conmovido con tanta belleza,
Madre de Dios,
cuélame en tu mirada de amor de la Anunciación.

Hágase en mí, de cora zón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

(María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de un Dios Redentor.)(Bis)
(Si se termina aquí el canto, en el bis:
primavera de Dios Redentor.)

Nota: en el estribillo final, sea cuando sea,
en el bis, la segunda voz dice: Ave María.

Versión original:
Intro:


Dijiste "sí"
y la tierra estalló de alegría.
Dijiste "sí"
y en tu vientre latía divina la Salvación.

Hágase en mí, de corazón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de Dios Redentor.

Gabriel tembló,
conmovido con tanta belleza,
Madre de Dios,
cuélame en tu mirada de amor de la Anunciación.

Estribillo final (bis):
Hágase en mí, de cora zón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de un Dios Redentor.
(en el bis: primavera de Dios Redentor.)

Nota: en el estribillo final, en el bis,
la segunda voz dice: Ave María.
María, mírame, María, mírame,
si tú me miras, Él también me mirará.
Madre mía, mírame, de la mano llévame,
muy cerca de Él, que ahí me quiero quedar.

María, cúbreme con tu manto
que tengo miedo, no sé rezar.
Que por tus ojos misericordiosos,
tendré la fuerza, tendré la paz.

Estribillo
Varias versiones de estribillo:
(Matrimonios)
María, míralos, María, míralos,
si Tú los miras, Él también los mirará.
Madre mía, míralos, de la mano llévalos
muy cerca de Él, que ahí se quieren quedar.

(Difuntos u otros)
María, míralo (la), María, míralo (la),
si Tú lo (la) miras, Él también lo (la) mirará.
Madre mía. míralo (la), de la mano llévalo (la)
muy cerca de Él, que ahí se quiere quedar.

Varias versiones de estrofa:
María, cúbreme con tu manto
que tengo miedo, no sé rezar.
Que por tus ojos misericordiosos
tendré la fuerza, tendré la paz.

Madre, consuélame de mis penas
que tengo miedo, no sé rezar.
Que por tus ojos misericordiosos
quiero ir al Cielo y verlos ya.

(Familia)
María, Madre, somos tus hijos,
nos acogemos en tu protección.
Que por tus ojos misericordiosos
nuestra familia, viva el Amor.

(Dolor)
María, Madre de los que sufren
dale un sentido a este dolor
Que por tus ojos misericordiosos
hasta en la pena, vea tu Amor.

(Adviento, Navidad)
Madre, acógeme en el pesebre
junto a tu Niño y a San José.
Que por tus ojos misericordiosos
toda mi vida, sea un Belén.

En tus brazos quieren, descansar.....