Yo tengo un gozo en el alma, ¡grande!,
gozo en el alma, ¡grande!,
gozo en el alma y en mi ser,
¡aleluya, gloria a Dios!
Es como un río de agua viva, ¡viva!
río de agua viva, ¡viva!
río de agua viva en mi ser.

Ama a tu hermano y alaba a tu Señor,
ama a tu hermano y alaba a tu Señor.
Da gloria a Dios, gloria a Dios,
gloria a Él.
Ama a tu hermano y alaba a tu Señor.

Con alegría alaba a tu Señor,
con alegría alaba a tu Señor.
Da gloria a Dios, gloria a Dios,
gloria a Él,
con alegría alaba a tu Señor.

No te avergüences y alaba a tu Señor,
no te avergüences y alaba a tu Señor.
Da gloria a Dios, gloria a Dios,
gloria a Él,
no te avergüences y alaba a tu Señor.

Ama a María y alaba a tu Señor,
ama a María y alaba a tu Señor.
Da gloria a Dios, gloria a Dios,
gloria a Él,
ama a María y alaba a tu Señor.
Mi Dios está vivo, Él no está muerto.
Mi Dios está vivo en mi corazón.
Mi Dios está vivo, ha resucitado;
lo siento en mis manos, lo siento en mis pies,
lo siento en mi alma y en mi ser.

¡Oh, oh, oh, oh, hay que nacer del agua!
¡Oh, oh, oh, oh, hay que nacer
del Espíritu de Dios!
(¡Oh, oh, oh, oh, hay que nacer
del agua y del Espíritu de Dios,
hay que nacer del Señor!)(Bis)

Prepárate para que sientas,
prepárate para que sientas,
prepárate para que sientas
el Espíritu de Dios.
Déjalo que se mueva,
déjalo que se mueva,
déjalo que se mueva
dentro de tu corazón.

Mi Dios está vivo, Él no está muerto.
Mi Dios está vivo en mi corazón.
Lo veo a mi lado, nunca me abandona;
lo veo por el aire, lo veo junto al mar,
lo veo por el monte caminar.

Estribillo
¡Gloria a Ti, por siempre,
por siempre, por siempre!
¡Gloria a Ti, por siempre,
por siempre! Amén.

Cielo y tierra cantad
himnos al Creador,
decidle al viento y al mar
la gloria del Señor.

Estribillo
Pueblos en libertad,
campos en esplendor,
decidle a la humanidad,
la gloria del Señor.

Estribillo
Siempre yo cantaré,
siempre yo alabaré
las maravillas de Dios,
la gloria del Señor.

Estribillo
"Aleluya", cantará
quien perdió la esperanza;
y la tierra sonreirá.
¡Ale-lu-u-ya!

Lo cantamos 3 veces:
la primera con arpegio,
la segunda con rasgueo suave,
la tercera con rasgueo fuerte;
subiendo, escalonadamente, el volumen de la voz en cada una de ellas.
¿Qué te puedo dar que no me hayas dado Tú?
¿Qué te puedo decir que no me hayas dicho Tú?
¿Qué puedo hacer por Ti si yo no puedo hacer nada,
si yo no puedo hacer nada, si no es por Ti, mi Dios?

(Todo lo que sé, todo lo que soy,
todo lo que tengo es tuyo.)(Bis)
(Santo, santo, santo, santo,
santo es el Señor.
Llenos están el cielo y tierra
de tu gloria.) (Bis)

(¡Hosanna en el cielo!
Bendito el que viene
en nombre del Señor.
¡Hosanna en el cielo!) (Bis)

Estribillo final:
*con las dos voces juntas (chicas: santo...; chicos: hosanna...)
*y terminar en DO.
Da la paz, hermano, da la paz;
constrúyela en tu corazón
y con tu gesto afirmarás
que quieres la paz.
Que tu paz, hermano, sea don,
es el mejor signo de amor
que Tú nos puedes ofrecer:
abrazo de paz.

(Paz en la tierra,
paz en las alturas,
que el gozo eterno reine
en nuestro corazón.)(Bis)
(Terminar el bis: ... en nuestro corazón.)

Segunda voz del estribillo:
Paz, paz, paz, Señor,
paz, paz, paz, Señor.
que el mundo vive sediento de paz,
sediento de tu amor.
Dame de esa paz, paz, paz, Señor,
paz, paz, paz, Señor,
que el mundo vive sediento de paz,
sediento de tu amor.
Cordero de Dios,
Tú, que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros,
ten piedad de nosotros.

¡Oh! Cordero de Dios,
Tú, que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros,
ten piedad de nosotros.

¡Oh! Cordero de Dios,
Tú, que quitas el pecado del mundo.
danos la paz,
danos la paz.
El Señor, Dios, nos amó como nadie amó jamás.
Él nos guía como estrella cuando no existe la luz.
Él nos da todo su amor mientras la fracción del pan.
Es el pan de la unidad, el pan de Dios.

Es mi Cuerpo, tomad y comed.
Esta es mi Sangre, tomad y bebed,
pues Yo soy la Vida, yo soy el Amor.
¡Oh, Señor, condúcenos hasta tu amor!

El Señor, Dios, nos amó como nadie amó jamás.
Sus paisanos le creían hijo de un trabajador.
Como todos Él también ganó el pan con su sudor,
y conoce la fatiga y el dolor.

Estribillo
El Señor, Dios, nos amó como nadie amó jamás.
Él reúne a los hombres y les da a vivir su amor.
Los cristianos todos ya miembros de su cuerpo son,
nadie puede separarles de su amor.

Estribillo
El Señor nos da su Amor como nadie nos lo dio.
El reúne a sus amigos en la mesa del amor.
En el mundo todos son carne y sangre del Señor.
Nadie puede separarnos de su amor.

Estribillo
Yo siento, Señor, que Tú me amas;
yo siento, Señor, que te puedo amar.
Háblame, Señor, que tu siervo escucha,
háblame, ¿qué quieres de mí?

Señor, Tú has sido grande para mí,
en el desierto de mi vida: ¡háblame!
Yo quiero estar dispuesto a todo,
toma mi ser, mi corazón es para Ti,
(por eso canto tus maravillas,
por eso canto tu amor.) (Bis)

Te alabo, Jesús, por tu grandeza,
mil gracias te doy por tu gran amor.
Heme aquí, Señor, para acompañarte,
heme aquí, ¿qué quieres de mí?

Estribillo final: terminar en DO, alargando en voz, el SOL.
Sois la sal,
que puede dar sabor
a la vida.
Sois la luz,
que tiene que alumbrar,
llevar a Dios.
Junto a ti, María, como un niño quiero estar,
tómame en tus brazos, guíame en mi caminar.
Quiero que me eduques, que me enseñes a rezar;
hazme transparente, lléname de paz.

Madre, Madre, Madre, Madre.
Madre, Madre, Madre, Maadre.

Gracias, Madre mía, por llevarnos a Jesús,
haznos más humildes, tan sencillos como tú.
Gracias, Madre mía, por abrir tu corazón,
porque nos congregas y nos das tu amor.

Estribillo