(Alegre la mañana que nos habla de Ti, alegre la mañana.) (Bis) En nombre del Dios Padre, del Hijo y del Espíritu, salimos de la noche y estrenamos la aurora; saludamos el gozo de la luz que nos llega resucitada y resucitadora.
Estribillo Tu mano acerca el fuego a la sombría tierra y el rostro de las cosas se alegra en tu presencia. Silabeas el alba igual que una palabra. Tú pronuncias el mar como sentencia.
Estribillo Regresa, desde el sueño, el hombre a su memoria, acude a su trabajo, madruga sus dolores; le confías la tierra, y a la tarde la encuentras, rica de pan y amarga de sudores.
Estribillo Y Tú te regocijas, ¡oh, Dios!, y Tú prolongas en sus pequeñas manos, tus manos poderosas. Y están de cuerpo entero los dos así creando, los dos así velando por las cosas.
Estribillo ¡Bendita la mañana que trae la gran noticia de tu presencia joven, en gloria y poderío; la serena certeza con que el día proclama que el sepulcro de Cristo está vacío!
La Virgen sueña caminos, está a la espera. La Virgen sabe que el Niño está muy cerca. De Nazaret a Belén hay una senda; por ella van los que creen en las promesas.
Los que soñáis y esperáis la Buena Nueva, abrid las puertas al Niño, que está muy cerca. El Señor cerca está. Él viene con la paz. El Señor cerca está. Él trae la verdad. En estos días del año el pueblo espera que venga pronto el Mesías a nuestra tierra. En la ciudad de Belén llama a las puertas, preguntan en la posadas y... no hay respuesta.
Estribillo La tarde ya lo sospecha: está alerta. El sol le dice a la luna que no se duerma. A la ciudad de Belén vendrá una estrella, vendrá con todo el que quiera cruzar fronteras.
La Virgen se está peinando entre cortina y cortina. Los cabellos son de oro y el peine de plata fina.
Pero mira como beben los peces en el río, pero mira como beben por ver a Dios nacido. Beben y beben y vuelven a beber, los peces en el río por ver a Dios nacer. La Virgen está lavando y tendiendo en el romero. Los angelitos cantando y el romero floreciendo.
Estribillo La Virgen va caminando, va caminando solita. No lleva más compañía que al Niño de la manita.
Estribillo La Virgen está lavando con un poco de jabón. Se le picaron las manos, manos de mi corazón.