Vendrá con gran poder con fuerte gloria,
vendrá a saciar los ojos que le buscan
y al juntar en sus plantas nube y tierra
será la tierra meta de su ruta.
La tierra para Él peana y cielo,
morada nueva, huerto sin la tumba,
su tierra, patria, tierra de vivientes
la tierra prometida, herencia suya.

Vendrá con el fulgor de la sentencia
vendrá con la piedad a quien acuda,
buscando sólo gracia en su mirada
cubierto con su paz y vestidura.
Vendrá veloz, furtivo y repentino,
como el hombre malvado en noche oscura
vendrá como el esposo entre cantares
esperado con lámparas y alcuzas.

(posibilidad de subir 1 tono en las 2 últimas estrofas)

Vendrá y será su adviento nuestro cielo,
su alegría en final de nuestra lucha
y si aún el rebelde se resiste
se hará infierno la cólera absoluta.
Oh, Cristo, que viniste y que vendrás
Hijo eterno, Señor de Gloria suma,
acoge con tu gran Misericordia
y en tu venida reina con ternura.

(Amén, Amen, Amén.)(Bis)
Amén.
En nuestra oscuridad,
enciende la llama de tu amor, Señor,
de tu amor, Señor.
En nuestra oscuridad,
enciende la llama de tu amor, Señor,
de tu amor, Señor.
Solista o varones:
Señor, Señor, Señor, ten piedad.

Coro o mujeres:
Señor, Señor, Señor, ten piedaad.

Solista o varones:
Cristo, Cristo, Cristo, ten piedad.

Coro o mujeres:
Cristo, Cristo, Cristo, ten piedaad.

Solista o varones:
Señor, Señor, Señor, ten piedad.

Coro o mujeres:
Señor, Señor, Señor, ten piedaad.
El Señor está cerca,
alegraos en Él. ¡Alelu-u-u-uya-a!
Alegraos en Él, alegraos en Él,
alegraos en Él. ¡Aleluya!

Que se alegre el desierto
y exulte la tierra,
como renuevo que brota
es la venida de Dios.
Que se alegre el humilde
y el de alma afligida,
el Señor es poderoso,
sabe hacer maravillas.

Estribillo
Que se alegren los pobres,
los que están oprimidos,
viene un día de gracia,
de victoria y justicia.
Que se alegre el hambriento
y el sediento de Dios,
una mesa abundante
les prepara el Señor.

Estribillo
Que se alegren los jóvenes,
ancianos y niños,
se tomarán de la mano
en señal de concordia.
Que se alegre el creyente
y todo hombre que espera,
de quienes buscan a Dios
la salvación está cerca.

Estribillo
Por los niños que empiezan la vida,
por los hombres sin techo ni hogar;
por los pueblos que sufren la guerra,
te ofrecemos el vino y el pan.

(Pan y vino sobre el altar
son ofrendas de amor;
pan y vino serán después
tu Cuerpo y Sangre, Señor.)(Bis)

Por los hombres que viven unidos,
por los hombres que buscan la paz;
por los pueblos que no te conocen,
te ofrecemos el vino y el pan.

Estribillo
Por aquellos a quienes queremos,
por nosotros y nuestra amistad;
por los vivos y por los difuntos,
te ofrecemos el vino y el pan.

Estribillo final: terminar en el acorde
con el que se comienza el canto.
(Santo, Santo, Santo, Santo,
Santo es el Seño-o-or.
Llenos están el cielo y tierra
de tu amor.) (Bis)

Bendito el que viene en el nombre,
el que viene en el nombre del Señor,
del Señor.

Nota: es opcional cantar el estribillo final una vez

Segunda voz:
Santo es el Señor,
llenos están
el cielo y tierra
de su amor.
Cordero de Dios
que quitas el pecado del mundo
ten piedad de nosooootros, ten piedad.

Cordero de Dios
que quitas el pecado del mundo
ten piedad de nosooootros, ten piedad.

Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo
danos la paz.
Toda la tierra espera al Salvador,
y el surco abierto, a la obra del Señor;
es el mundo que lucha por la libertad,
reclama justicia y busca la verdad.

Dice el profeta al pueblo de Israel:
“De Madre virgen ya viene el Emmanuel,
será "Dios-con-nosotros", hermano será,
con Él la esperanza al mundo volverá.

Cerros y valles habrá que preparar,
nuevos caminos tenemos que trazar;
el Señor está cerca, hay que irlo a encontrar,
y todas las puertas abrir de par en par.”

En un pesebre, Jesús apareció
pero en el mundo es donde nace hoy,
vive en nuestros hermanos, con ellos está,
y vuelve de nuevo a darnos libertad
Desde abajo (desde dentro) y desde cerca,
te encarnas en Nazaret
y en las cosas más pequeñas
nos invitas a creer.


(para ir a las repeticiones)

Nota:
3 veces: La primera, con arpegio. El resto, con rasgueo.
Lo que está entre paréntesis (desde dentro) es segunda voz y la hacen las chicas.
Quiero caminar contigo, María,
pues tú eres mi Madre, eres mi guía.
Tú eres para mí el más grande ejemplo
de santidad, de humildad.

Quiero caminar contigo, María,
no solo un momento, todos los días.
Necesito tu amor de Madre,
tu intercesión ante el Señor.

Guía mis pasos,
llévame al cielo
Bajo tu manto,
no tengo miedo.
Llena de gracia,
Ave María,
hoy yo te ofrezco
toda mi vida.

Quiero caminar contigo, María,
Madre en el dolor y en la alegría.
Tú que fuiste fiel hasta el extremo.
Fiel en la cruz, fiel a Jesús.

Estribillo
Celestial princesa,
mírame con compasión.
Hoy te doy mi alma,
vida y corazón.

Estribillo
Nota: toques secos ↓-↓-↓ en :
"de santidad, de humilad",
"tu intercesión ante el Señor",
"fiel en la cruz, fiel a Jesús".