Hoy quiero, Señor, ponerlo todo en tu presencia, darme hasta gastarme contigo y por Ti. Hoy quiero, Señor, ponerlo todo ante tu puerta para en todo amarte y servir.
Enciéndeme y déjame arder donde haga falta. Enciéndeme y déjame ser tu luz, y así poder llevarte hasta todas las almas, saciar la sed que tienes Tú desde la cruz. Hoy quisiera, Madre, poner todo en tu presencia, darme hasta gastarme, decirle que sí. Hoy te pido, Madre, que dejes mi puerta abierta para en todo amarle y servir.
Aleluya, alelu, aleluya, aleluya, aleluya. Aleluya, alelu, aleluya, aleluya, aleluya. Yo quiero más y más de Cristo, yo quiero más de su Poder, yo quiero más de su Presencia, yo quiero más y más de Él.
Te ofrecemos el pan, fruto de nuestro sudor. Te ofrecemos el vino de nuestro campo, el mejor. Para Ti, Señor, el pan y el vino; para Ti, Señor, el trabajo de los campesinos.
Te ofrecemos también nuestra alegría, Señor. En tu mesa ponemos nuestra amistad, nuestro amor. Para Ti, Señor, así cantamos; para Ti, Señor, con el canto de nuestros hermanos.
Santo (santo), santo (santo), santo es el Señor, Dios del Universo, santo es el Señor. {end_of_chorus} El cielo y la tierra están llenos de tu gloria. ¡Hosanna en el cielo!
Estribillo Bendito es el que viene en el nombre del Señor. ¡Hosanna en el cielo!
Quiero alabarte sin parar todos los días, que tu presencia sea el anhelo de mi vida. Yo quiero hacer tu voluntad. Señor, yo te quiero agradar y quiero darte siempre el primer lugar. Yo quiero darte siempre el primer lugar.
(Si Tú eres el Rey, el Rey de mi vida, el número Uno en mi corazón, a Ti yo te rindo todo lo que soy.)(Bis) Quiero adorarte sin parar todos los días, que tu presencia sea el anhelo de mi vida. Yo quiero hacer tu voluntad. Señor, yo te quiero agradar y quiero darte siempre el primer lugar. Yo quiero darte siempre el primer lugar.
Salve, Señora, de tez morena, Virgen y madre del Redentor. Santa María de la Almudena, Reina del cielo, madre de amor; Santa María de la Almudena, Reina del cielo, madre de amor. Tú, que estuviste oculta en los muros de este querido y viejo Madrid, hoy resplandeces ante tu pueblo, que te venera y espera en ti.
Estribillo Bajo tu manto, Virgen sencilla, buscan tus hijos la protección. Tú eres patrona de nuestra villa, madre amorosa, templo de Dios.