Dios está aquí,
tan cierto como el aire que respiro,
tan cierto como la mañana
se levaanta,
tan cierto como que este canto
lo puedes oír.

Lo puedes sentir
moviéndose entre los que aman.
Lo puedes oír
cantando con nosotros aquí.
Lo puedes llevar
cuando por esa puerta salgas.
Lo puedes guardar
muy dentro de tu corazón.

Estribillo
Lo puedes notar
junto a ti en cualquier momento;
le puedes hablar
de esa vida que le quieres dar;
no temas ya más,
Él es Dios y nos perdona a todos;
Jesús está aquí,
si tú quieres le puedes seguir.

Estribillo
(Aleluya, aleluya,
aleluya, aleluya,
aleluya.) (Bis)

Si sientes que Cristo,
en ti vivo está
grita fuerte en tu alma:
¡Aleluya!
Si piensas que el mundo,
aún puede cambiar
grita fuerte en tu alma:
¡Aleluya!

Aleluya, aleluya,
aleluya, aleluya,
aleluya.
Esto que te doy es vino y pan, Señor,
esto que te doy es mi trabajo,
es mi corazón, es mi alma,
es mi cuerpo y mi razón,
el esfuerzo de mi caminar.

Toma mi vida, ponla en tu corazón.
Dame tu mano y llévame.
Cambia mi pan en tu Carne
y mi vino en tu Sangre
y a mí, Señor, renuévame,
límpiame y sálvame.

Esto que te doy, mi vida es, Señor,
es mi amor, también es mi dolor,
es la ilusión de mis sueños,
es mi gozo y mi llorar,
es mi canto y mi oración.

Estribillo
Esto que te doy no solo yo, Señor,
esta voz también es de mi hermano,
es la unión la paz y el orden,
la armonía y felicidad,
es un canto en comunidad.

Estribillo
(Santo ooooo, santo. ¡Hosaanna!)(Bis)

(Hosanna hey, hosanna hey.
Hosanna a Cristo, Jesús.)(Bis)

(Los cielos y la tierra están llenos
de tu Gloria, Señor.)(Bis)

Estribillo
(Bendito el que viene en el nombre,
en el nombre tuyo, Señor.)(Bis)

Estribillo
(Santo ooooo, santo. ¡Hosaanna!)(Bis)
Pon tu mano en la mano
de aquel que te da la mano.
Pon tu mano en la mano de aquel que te dice:
«Ven».
Él será, tu amigo para la eternidad.
Pon tu mano en la mano de aquel que te dice:
«Ven».

Pon tus ojos en los ojos de aquel que te está mirando.
Pon tus ojos en los ojos de aquel que te mira bien.
Él será tu amigo hasta la eternidad.
Pon tus ojos en los ojos de aquel que te mira bien.

Pon tu vida en las manos de aquel que te está esperando.
Pon tu vida en las manos de aquel que te dice: «Ven».
Él será tu amigo hasta la eternidad.
Pon tu vida en las manos de aquel que te dice: «Ven».
Para que mi amor no sea un sentimiento
tan sólo un deslumbramiento pasajero;
para no gastar las palabras más mías
ni vaciar de contenido mi "te quiero".
Quiero hundir más hondo mi raíz en Ti,
y cimentar en solidez, este, mi afecto;
pues mi corazón, que es inquieto y es frágil
sólo acierta si se abraza a tu proyecto.

Más allá de mis miedos,
más allá de mi inseguridad,
quiero darte mi respuesta:
"Aquí estoy para hacer tu voluntad
para que mi amor sea decirte “sí”
hasta el final".

Duermen su sopor y temen en el huerto;
ni sus amigos acompañan al maestro.
Si es hora de cruz, es de fidelidades;
pero el mundo nunca quiere aceptar esto.
Dame a comprender, Señor, tu amor tan puro,
amor que persevera en cruz, amor perfecto;
dame serte fiel cuando todo es oscuro,
para que mi amor sea más que un sentimiento.

Estribillo
No es en las palabras, ni es en las promesas
donde la historia tiene su motor secreto;
sólo es el amor en la cruz madurado,
el amor que mueve a todo el universo.
Pongo mi pequeña vida hoy en tus manos,
por sobre mis seguridades y mis miedos;
y, para elegir tu querer y no el mío,
hazme en mi Getsemaní fiel y despierto.

Estribillo final (bis): en el bis, subir un tono.

Más allá de mis miedos,
más allá de mi inseguridad,
quiero darte mi respuesta:
"Aquí estoy para hacer tu voluntad
para que mi amor sea decirte “sí”
hasta el final".

Más allá de mis miedos,
más allá de mi inseguridad,
quiero darte mi respuesta:
"Aquí estoy para hacer tu voluntad
para que mi amor sea decirte “sí”
hasta el final".