Shalom, Hosanna. Shalom, Hosanna. Bendito el que viene en nombre del Señor. Shalom, Hosanna. Shalom, los niños hebreos. Shalom, con ramos de olivo aclamaban al Señor. Shalom, Hosanna.
Estribillo Shalom, los niños hebreos. Shalom, tendiendo sus mantos, aclamaban al Señor. Shalom, Hosanna.
Estribillo Shalom, con ellos nosotros. Shalom, con palmas y ramos, aclamamos al Señor. Shalom, Hosanna.
Escucha, tú, la Palabra de Dios, no solo con tus oídos, también con tu corazón. Escucha, tú, la Palabra de Dios, estate siempre atento a su voz. Escucha, tú, la Palabra de Dios, no solo con tus oídos, también con tu corazón. Escucha, tú, la Palabra de Dios, estate siempre atento a su voz. Déjala entrar dentro de tu corazón, pásala a tu mente y a tu situación; vívela, vívela en tu realidad, haz que por tu vida llegue a los demás.
Estribillo Si tus manos son instrumento de Dios, da tu pan al pobre, préstale tu voz, ama a Dios, ama a Dios con tu caridad; oye su Palabra con sinceridad.
Todos los problemas se sumergen en el vino al tiempo de cenar. No me molestéis veo las respuestas, esta noche nada malo va a pasar.
Siempre deseé ser un Apóstol y contar al mundo mi verdad, escribirla en los Evangelios para así pasar a la posteridad.
Todo el que come de este pan, todo el que bebe de este vino en Mí permanece y Yo en él. Siempre vivirá el amor de mi Reino.
Otra letra: Tú que estás sentado a nuestra mesa, Tú que has sido uno entre nosotros, ven y encontraremos la alegría. ¿Qué haremos sin Ti, Señor, si ahora Tú te vas?
Tú que has dado vida a nuestro mundo no te olvides nunca de nosotros. ¿Dónde encontraremos otro Cristo? ¿Qué haremos sin Ti, Señor, si ahora Tú te vas?
Hoy entre los hombres hay discordia, hoy entre nosotros no hay amor. Sólo Tú podrás, Señor, salvarnos. Sólo en Ti hay amor, en Ti hemos puesto nuestra fe.
Eres defensor del oprimido. Tú has querido al hombre liberar. Este pan es pan de nuestra vida, crea entre nosotros una gran fraternidad.
Mira, nuestra bolsa está vacía, no tenemos nada que comer. Haz como aquel día en la montaña: háblanos, Señor, habla del Reino, hazlo otra vez.
Gracias, mi Señor, por esta cena, no queda nada por hacer. Gracias por tu entrega generosa. Permanece siempre entre nosotros buen Jesús.
Hosanna-hey, hosanna-ha. Hosanna-hey, hosanna-hey, hosanna-ha. Hosanna-hey, hosanna-ha. Hosanna-hey, hosanna-hey, hosanna-ha. Él es el Santo, es el hijo de María, es el Dios de Israel, es el hijo de David.
Estribillo Vamos a Él con espigas de mil trigos, y con mil ramos de olivos, siempre alegres, siempre en paz.
Estribillo Él es el Cristo, es el unificador, es hosanna en las alturas, es hosanna en el amor.
Estribillo Es la alegría, la razón de mi existir, es la vida de mis días, es consuelo en mi sufrir.
Todo empezó en una cruz donde un hombre sufrió y un Dios se entregó. Silenciosa la muerte llegó extinguiendo la luz que en un grito se ahogó.
Viendo su faz de dolor una madre lloró y su amigo calló. Pero siendo una entrega de amor su camino siguió y en algún otro lado una luz se encendió.
Siendo hombre, amigo, esclavo y maestro; siendo carga pesada, profesor y aprendiz entregó hasta su cuerpo en el pan y la vid.
Desde entonces lo he visto caminar a mi lado, a ese Dios que se humilla y muere por mí. Es la barca en mi playa, el ruido del silencio, que se acerca a su Hijo y me abraza feliz, que se acerca a su Hijo y me abraza feliz. Viendo un humilde calvario con rostro cansado soporta la cruz, y al verme rezando a sus pies se olvida de Él, me toma en sus brazos y me acoge otra vez.
Siendo fuego, paloma, el agua y el viento; siendo niño inocente, un Padre y Pastor hoy acepta mi ofrenda, es mi vida Señor.
Estribillo Y si ahora yo acepto esta cruz es por esa persona, ese Dios, es por Cristo, Jesús.
Porque eres tan distinta de las demás porque siempre sonríes cuando te das, porque estás queriendo siempre, no te cansas jamás, porque se hará un vacío nunca lleno si te vas.
Por todo eso y tal como soy para darte las gracias te canto hoy y pido que me ayudes a responder a parecerme a ti. Dame tu fuerza y tu libertad tu confianza en Dios, tu fidelidad, y quizás como tú llegue a ser fiel a decir que "sí". Porque viste qué hondo era decir "sí" a Gabriel, porque sabes gozar de la alegría de Isabel, porque toda tu vida te has mantenido fiel, porque eres Medianera entre nosotros y Él.
Estribillo Porque eres transparente y dejas ver a Dios, porque es imposible compararnos las dos, porque eres inocente y no conoces el mal, porque sigues luchando aunque a otros les da igual.