Ven, ven, Señor, no tardes. Ven, ven, que te espera a mos. Ven, ven, Señor, no tardes. Ven, pronto, Señor. Al mundo le falta vida. Al mundo le falta luz. Al mundo le falta el cielo. Al mundo le faltas Tú.
Estribillo Envuelto en sombría noche el mundo sin paz no ve, buscando va una esperanza buscando, Señor, tu fe.
Estribillo El mundo muere de frío, el alma perdió el calor. Los hombres no son hermanos, el mundo no tiene amor.
Estribillo Nota: Este orden de estrofas se canta en la Parroquia de San Bruno (Madrid)
Vigilantes encendemos la corona del Adviento, en los cirios ofrecemos cuatro etapas de un encuentro. 1er Domingo de Adviento: Nos evoca ya el primero el Antiguo Testamento. Los profetas, voz del Verbo, lo anunciaron desde lejos.
2do Domingo de Adviento: El segundo trae el eco del Bautista pregonero. Su mensaje en el desierto: “Allanadle los senderos”.
3er Domingo de Adviento: Los tres cirios van tejiendo la esperanza del misterio de la Virgen en el seno: el Rocío de los Cielos.
4to Domingo de Adviento: Cuatro cirios encendemos ya en la cumbre del Adviento. Todo es gracia, luz y fuego en la hora del encuentro.
Alegraos hombres nuevos, sed testigos del Evangelio Id al mundo, mensajeros, Luz en medio de los pueblos.
Cuatro cirios cual luceros que jalonan nuestro Adviento. Expectantes son anhelos, con sus llamas contra el viento.
Aleluya, alelu, aleluya, aleluya, aleluya. Aleluya, alelu, aleluya, aleluya, aleluya. Yo quiero más y más de Cristo, yo quiero más de su Poder, yo quiero más de su Presencia, yo quiero más y más de Él.
Esto que te doy es vino y pan, Señor, esto que te doy es mi trabajo, es mi corazón, es mi alma, es mi cuerpo y mi razón, el esfuerzo de mi caminar.
Toma mi vida, ponla en tu corazón. Dame tu mano y llévame. Cambia mi pan en tu Carne y mi vino en tu Sangre y a mí, Señor, renuévame, límpiame y sálvame. Esto que te doy, mi vida es, Señor, es mi amor, también es mi dolor, es la ilusión de mis sueños, es mi gozo y mi llorar, es mi canto y mi oración.
Estribillo Esto que te doy no solo yo, Señor, esta voz también es de mi hermano, es la unión la paz y el orden, la armonía y felicidad, es un canto en comunidad.
Toda la tierra espera al Salvador, y el surco abierto, a la obra del Señor; es el mundo que lucha por la libertad, reclama justicia y busca la verdad.
Dice el profeta al pueblo de Israel: “De Madre virgen ya viene el Emmanuel, será "Dios-con-nosotros", hermano será, con Él la esperanza al mundo volverá.
Cerros y valles habrá que preparar, nuevos caminos tenemos que trazar; el Señor está cerca, hay que irlo a encontrar, y todas las puertas abrir de par en par.”
En un pesebre, Jesús apareció pero en el mundo es donde nace hoy, vive en nuestros hermanos, con ellos está, y vuelve de nuevo a darnos libertad
La Virgen sueña caminos, está a la espera. La Virgen sabe que el Niño está muy cerca. De Nazaret a Belén hay una senda; por ella van los que creen en las promesas.
Los que soñáis y esperáis la Buena Nueva, abrid las puertas al Niño, que está muy cerca. El Señor cerca está. Él viene con la paz. El Señor cerca está. Él trae la verdad. En estos días del año el pueblo espera que venga pronto el Mesías a nuestra tierra. En la ciudad de Belén llama a las puertas, preguntan en la posadas y... no hay respuesta.
Estribillo La tarde ya lo sospecha: está alerta. El sol le dice a la luna que no se duerma. A la ciudad de Belén vendrá una estrella, vendrá con todo el que quiera cruzar fronteras.