Abran las puertas, abran las puertas, ábranlas al Redentor. Abran las puertas, abran las puertas, ábranlas al Redentor. Bendecid al Señor, todos los siervos de Dios, alzad las manos en el santuario y bendecid al Señor, alzad las manos en el santuario y bendecid al Señor.
Estribillo Nota: si el estribillo se hace con segundas voces, los acordes son: Abran, abran las puertas al Redentor. Abran, abran las puertas al Redentor.
Sé mi luz, enciende mi noche. Sé mi luz, enciende mi noche. Sé mi luz, enciende mi noche, mi noche; sé mi luz. El camino sin Ti es tan largo, y tu llanto acoge mi dolor. Tu Palabra acalla mi miedo, y tu grito se expresa en mi canto.
Estribillo Nota: el acorde de "DO" puede ser "solm", y el acorde de "SOL" del último "noche", se podría suprimir.
Escucho hoy, Señor, tu voz, susurra dentro, en mi interior, me llena de sosiego y de paz; mas necesito alimentar mi alma de tu realidad. Tu Evangelio es un Aleluya.
(Aleluya, Aleluya Aleluya, Aleluuya.) (Bis) En el BIS del estribillo: chicas cantan voz alta y chicos, voz baja.
Junto a Ti, Señor, mi alma se siente feliz, y tu compañía es necesaria para mí. La seguridad de tu presencia siento en mí, como la vida que das y brotará sin fin.
Repartirás tu pan , tu cuerpo es, y ofreceremos la oración. Se beberá de Ti, tu sangre es, amor sin fin, el que nos das.
Repartirás tu pan, tu cuerpo es, y ofreceremos la oración. Se beberá de Ti, tu sangre es, amor sin fin, el que nos das. Tu cuerpo y sangre son. Crece la oración, la devoción y el gozo en mí. Mi trabajo ofrezco hoy sin a cambio pedir. Hay que mantener la unión en torno a tu amor, pues la fe sale de tu grandioso corazón.
El Señor está cerca, alegraos en Él. ¡Alelu-u-u-uya-a! Alegraos en Él, alegraos en Él, alegraos en Él. ¡Aleluya! Que se alegre el desierto y exulte la tierra, como renuevo que brota es la venida de Dios. Que se alegre el humilde y el de alma afligida, el Señor es poderoso, sabe hacer maravillas.
Estribillo Que se alegren los pobres, los que están oprimidos, viene un día de gracia, de victoria y justicia. Que se alegre el hambriento y el sediento de Dios, una mesa abundante les prepara el Señor.
Estribillo Que se alegren los jóvenes, ancianos y niños, se tomarán de la mano en señal de concordia. Que se alegre el creyente y todo hombre que espera, de quienes buscan a Dios la salvación está cerca.
¡Sólo Dios! ¡Sólo Dios! En tus atrios, Señor, quiero estar. Tú, mi tesoro y porción, mi delicia, Señor; mi fortaleza, mi vida, mi Dios y mi todo. Alma mía, no busques nada más, para ti, basta Dios y sólo Dios.
Tantas cosas en la vida nos ofrecen plenitud, y no son más que mentiras que desgastan la inquietud. Tú has llenado mi existencia al quererme de verdad. Yo quisiera, Madre Buena, amarte más.
En silencio escuchabas la Palabra de Jesús, y la hacías Pan de vida meditando en tu interior. La semilla que ha caído ya germina, ya está en flor. Con el corazón en fiesta cantaré:
Ave María, ave María. Ave María, ave Maríía. Desde que yo era muy niño has estado junto a mí, y guiado de tu mano aprendí a decir sí. Al calor de la esperanza nunca se enfrió mi fe, y en la noche más oscura fuiste Luz.
No me dejes, Madre mía, ven conmigo al caminar; quiero compartir mivida y crear fraternidad. Tantas cosas en nosotros son el fruto de tu amor. La plegaria más sencilla cantaré: