Cuanto veo, cuanto soy,
cuanto existe surgió por tu poder
mucho antes de que el mundo nacie ra
cada secreto conocías bien.
Ni los reinos, ni el saber,
ni la tierra que está bajo mis pies,
ni el más grande de todos los teso ros
son comparable con tu gran poder.
Y en la cruz, acep tas morir,
Rey sin voz desnudo en soledad
y sin luz, quedas muerto y ro to,
roto por mí, dejaste to do por mí
(roto por mí, quedaste roto por mí)