Si el gris de mi historia se enciende en colores
que nunca he soñado,
si amanezco distinto y despierto a la vida
en nueva plenitud,
si mi gozo florece haciéndose gratitud,
si vislumbro que Dios es fuente de mi virtud.
Estás aquí, resucitando.
Soy libre en Ti, me rescataste, me hiciste vivir.
Señor, Jesús, ya no hay cadenas, ni cruces, ni clavos,
si estás en mí y haces Pascua en mi existir.
Si el dolor es semilla que fue madurando
y entrega sus frutos,
si aun en el sufrimiento, de paz y consuelo
se estremece mi ser;
si descubro sentido, o me entrego aun sin ver,
y si intuyo que hay alguien en quien siempre creer.
Estribillo
Si mi miedo a lo incierto y temor a entregarme
se hacen confianza,
si al sentir que me llamas no escondo mi rostro
y digo "aquí estoy";
si la duda no existe, o es más puro mi amor,
si una fuerza divina siento en mi interior.
Estribillo