Déjense reconciliar
por Aquel que su vida entregó.
Sin cometer el pecado
Él se hizo pecado
por pura compasión y amor, y amooor,
por pura compasión y amor.
Es tiempo de conversión,
de ayuno y de oración,
de buscar al hermano,
dejar el pecado,
de reconciliación.
Estas cenizas, Señor,
signo de que nuestro corazón
se encuentra arrepentido
y decidido
de ya no volver atrás.
Estribillo
Volvamos todos al Señor,
retornemos de corazón.
Volvamos el rostro
porque polvo somos
y al polvo hemos de regresar.
Somos hijos de Dios,
herederos del Reino de amor,
nación santa,
pueblo escogido
en nuestro peregrinar al Señor.
Estribillo