{title: Emaús}
{artist: Maite López}
{capo: 0}
{key: Sol}
[Sol]Cada vez que nos ponemos en ca[Mim]mino hacia Emaús,
[Lam]en el diálogo sincero de co[Re]razón a corazón,
[Sol]cuando buscamos sentido al [Mim]mundo y su dolor,
[Lam]cuando abrimos nuestros ojos, mi[Re]rando alrededor,
[Do]en la pregunta pro[Si7]funda, en la [Mim]ínti[Re]ma amis[Do]tad,
[Lam]aunque no te reconozcamos, [Re]estás presente Tú.
{start_of_chorus}
[Do]Je[Sol]sús, [Do]Señor de Ema[Mim]ús, Dios de la his[Lam]toria, Dios del a[Re]mor.
[Do]Je[Sol]sús, [Do]Señor de Ema[Mim]ús, resuci[Lam]tado a nuestro la[Re]do.
{end_of_chorus}
Cada vez que decidimos escuchar y compartir,
acogiendo al extranjero sin juzgar ni preguntar;
en el abrir nuestra vida invitando a los demás
a sentarse a nuestra mesa para comer de nuestro pan;
cuando el corazón se enciende porque se ha sabido dar;
aunque no te reconozcamos, estás presente Tú.
{start_of_chorus}
Jesús, Señor de Emaús, Dios de los pobres, Dios del amor.
Jesús, Señor de Emaús, resucitado a nuestro lado.
{end_of_chorus}
Abre, Señor, nuestros ojos, abre nuestro corazón;
abre también nuestras manos, fortalece nuestros pies,
al escuchar tu palabra, mientras partimos el pan;
que vida y Eucaristía son tan sólo una unidad.
Cuando recorremos juntos el camino hacia Emaús,
aunque no te reconozcamos, estás presente Tú.
{start_of_chorus}
Jesús, Señor de Emaús, Dios de la vida, Dios del amor.
Jesús, Señor de Emaús, resucitado a nuestro lado.
Jesús, Señor de Emaús, Dios de la historia, Dios de la paz.
Jesús, Señor de Emaús, resucitado a nuestro lado.
{end_of_chorus}
Cada vez que nos ponemos en camino hacia Emaús,
en el diálogo sincero de corazón a corazón,
cuando buscamos sentido al mundo y su dolor,
cuando abrimos nuestros ojos, mirando alrededor,
en la pregunta profunda, en la ínti ma amistad,
aunque no te reconozcamos, estás presente Tú.
Je sús, Señor de Emaús, Dios de la historia, Dios del amor.
Je sús, Señor de Emaús, resucitado a nuestro lado.
Cada vez que decidimos escuchar y compartir,
acogiendo al extranjero sin juzgar ni preguntar;
en el abrir nuestra vida invitando a los demás
a sentarse a nuestra mesa para comer de nuestro pan;
cuando el corazón se enciende porque se ha sabido dar;
aunque no te reconozcamos, estás presente Tú.
Jesús, Señor de Emaús, Dios de los pobres, Dios del amor.
Jesús, Señor de Emaús, resucitado a nuestro lado.
Abre, Señor, nuestros ojos, abre nuestro corazón;
abre también nuestras manos, fortalece nuestros pies,
al escuchar tu palabra, mientras partimos el pan;
que vida y Eucaristía son tan sólo una unidad.
Cuando recorremos juntos el camino hacia Emaús,
aunque no te reconozcamos, estás presente Tú.
Jesús, Señor de Emaús, Dios de la vida, Dios del amor.
Jesús, Señor de Emaús, resucitado a nuestro lado.
Jesús, Señor de Emaús, Dios de la historia, Dios de la paz.
Jesús, Señor de Emaús, resucitado a nuestro lado.