{title: Nadie es Profeta en su tierra} {artist: Brotes de Olivo} {capo: 0} {key: La} [A]A Nazaret, Jesús vino, [D]donde Él se había cri[A]ado y en[F#m]tró como de costumbre en la Asam[D]blea del [E7]sábado. [A]Se levantó a leer [D]un libro de profe[A]cías, de[F#m]senrollando los textos, ha[D]bló sobre I[E7]saías: El Es[F#m]píritu de Dios sobre mí se ha posado desde el principio me un[D]gió y a anunciar me ha en[E7]viado la [F#m]Buena Nueva a los pobres, la libertad al cautivo, dar la vista a los ciegos, y deste[D]rrar el cas[E7]tigo, [A]proclamar a viva voz, la [F#m]amnistía del Dios [C#m]vivo, [E7]y dando fín la lec[A]tura la [E7]devolvió al mi[A]nistro. Esto [A]que acabáis de oír, en mí [D]hoy se ha cum[A]plido, y [F#m]muchos se admiraban, por lo [D]visto y por lo [E7]oído. Mas los de[F#m]más decían: ¡Es el hijo de José! y el enviado de [D]Dios, no tardó en respon[E7]der: De se[F#m]guro me diréis: ¡Médico, cúrate! las obras de Cafar[D]naún hazlas aquí tam[E7]bién. [A]Mas en verdad os digo [F#m]que aquí las puertas me [C#m]cierran [E7]no he sido bien reci[A]bido, [E7]nadie es profe[A]ta en su tierra.