{title: Betania}
{artist: Germán Pravia}
{capo: 0}
{key: Do}
[Do]Oscuro camino, horizonte ce[Lam]rrado,
[Do]sin ver nada claro por donde se[Fa]guir,
un gran aguacero, tormenta que vi[Sol]ene,
el tiempo sugiere buscar dónde [Do]ir.
[Sol]Betania es lugar [Do]donde paso la [Lam]noche,
[Do]amor que, en derro[Do7]che, sabrá resguar[Fa]dar.
Betania es hogar donde velo y es[Do]pero
a que pase el mal ti[Sol]empo y empiece a clare[Do]ar.
{start_of_chorus}
[Do]Vamos a Betania [Lam]a cuidar la [Rem]vida,
casa del a[Sol]migo [Sol7]para el cora[Do]zón.
[Do]Vamos a Betania a [Lam]sanar he[Rem]ridas,
y seguir ca[Sol]mino desde el corazón de [Do]Dios.
{end_of_chorus}
[Do]Al ser peregrinos que van por la [Lam]vida,
[Do]se abren heridas de andar y de a[Fa]mar.
La misericordia nos tiende una [Sol]mano,
buen samaritano que ofrece ayu[Do]dar.
[Sol]Betania es la [Do]casa en donde la [Lam]vida
[Do]por fin resu[Do7]cita y vuelve a sur[Fa]gir.
Un grito que invita a salir hacia fu[Do]era,
es amor que li[Sol]bera y convoca a vi[Do]vir.
[Do]Betania posada, lugar del encu[Lam]entro,
[Do]corazón abierto, dispuesto a escu[Fa]char.
Hermanos y amigos que ofrecen sus [Sol]brazos,
su amor y regazo para descan[Do]sar.
¡Qué fiesta del alma estar sin apu[Lam]ros,
descalzos, seguros, en intimi[Fa]dad!
Un frasco se rompe, perfume que i[Do]nunda,
certeza pro[Sol]funda: ¡El Reino ya es[Do]tá!
[Do]Betania es de paso, no es la llega[Lam]da,
los pies se desatan para conti[Fa]nuar.
Unción en el cuerpo y fuerza en el [Sol]alma,
prepara batallas que habrá que enfren[Do]tar.
[Sol]Betania nos [Do]abre una nueva mi[Lam]rada:
[Do]andar en confi[Do7]anza el camino a la [Fa]cruz,
y en Jerusalén alentar la me[Do]moria:
¡El Señor de la his[Sol]toria es el siervo Je[Do]sús!
Oscuro camino, horizonte cerrado,
sin ver nada claro por donde seguir,
un gran aguacero, tormenta que viene,
el tiempo sugiere buscar dónde ir.
Betania es lugar donde paso la noche,
amor que, en derroche, sabrá resguardar.
Betania es hogar donde velo y espero
a que pase el mal tiempo y empiece a clarear.
Vamos a Betania a cuidar la vida,
casa del amigo para el corazón.
Vamos a Betania a sanar heridas,
y seguir camino desde el corazón de Dios.
Al ser peregrinos que van por la vida,
se abren heridas de andar y de amar.
La misericordia nos tiende una mano,
buen samaritano que ofrece ayudar.
Betania es la casa en donde la vida
por fin resucita y vuelve a surgir.
Un grito que invita a salir hacia fuera,
es amor que libera y convoca a vivir.
Betania posada, lugar del encuentro,
corazón abierto, dispuesto a escuchar.
Hermanos y amigos que ofrecen sus brazos,
su amor y regazo para descansar.
¡Qué fiesta del alma estar sin apuros,
descalzos, seguros, en intimidad!
Un frasco se rompe, perfume que inunda,
certeza profunda: ¡El Reino ya está!
Betania es de paso, no es la llegada,
los pies se desatan para continuar.
Unción en el cuerpo y fuerza en el alma,
prepara batallas que habrá que enfrentar.
Betania nos abre una nueva mirada:
andar en confianza el camino a la cruz,
y en Jerusalén alentar la memoria:
¡El Señor de la historia es el siervo Jesús!